No tiene fecha
ALMA GEMELA
Está por regresar, para volverse a ir; admiro demasiado su actitud nómada, en ocasiones la envidio. Algunos creen y son juzgados de ingenuos, que las almas gemelas existen; en realidad existen, pero el error que comparten muchas de las personas que creen en ellas, es el pensar que aquella es el amor de su vida, cuando en realidad no lo es. Una alma gemela es quien sin necesidad de explicaciones logra entenderte, leerte; ser junto contigo.
Ella, ella que conocí cuando me equivoqué de camino; ella que dentro de su ser supo que sería mi alma gemela, al igual que yo lo supe. Ella que sin palabras me aconseja y sin oírlas me escucha.
Basta un mensaje o una llamada; en realidad bastaba; para que armados con seis cervezas y una cajetilla de cigarros; conversáramos durante horas, comprendiéndonos, entendiéndonos. Deben de entender que cuando hablo de que ella me entiende, no lo hago en el sentido común y corriente del verbo entender, si los dos hablamos español y tenemos demasiadas cosas en común, esto va mucho más lejos. Cuando digo que ella me entiende, es que en verdad puede leerme, incluso puede desanudar la idea más compleja que pudiera pasar por mi cabeza; incluso en ocasiones ni siquiera yo logro hacer eso conmigo.
Seis cervezas, tres ella y tres yo; una cajetilla de cigarros, cenizas tiradas en el suelo, celulares sin contestar, oídos rojos de tanto escuchar, dolor de estómago de tanto reír y dos mentes conectadas en una misma frecuencia.
Me basta con empezar a hablar para saber que incluso antes de haber empezado, ella ya sabía cual sería el desenlace, es tal la conexión que tenemos que incluso podría parecer que somos siameses, siameses de pensamiento. Muchos dicen que los opuestos se atraen o que toda conversación se torna más interesante cuando hay discrepancia de opiniones, pero no es cuestión de forma de pensar o de opiniones casi idénticas. Hablar con ella es como hablar conmigo, como charlar frente al espejo; verla es entenderme, verla es entendernos.
Mi alma gemela regreso, para volverse a ir.